En Costa Rica durante el transcurso de 2019, se registraron aproximadamente diecinueve fallecidos producto del consumo de alcohol adulterado, específicamente en los meses de junio y julio.
Para octubre del 2020 la historia se repite, esta vez en la comunidad de La Carpio donde veintiún personas resultaron afectadas, y de las cuales ocho han fallecido.
El metanol, también conocido como alcohol de madera, es una sustancia tóxica que se obtiene a través de la destilación destructiva de astillas de madera. Esta sustancia es utilizada de muchas maneras a nivel industrial tales como: pinturas, disolventes, fabricación de plásticos, activo para la gasolina y artículos de limpieza.
La exposición sustancial al metanol en altas concentraciones puede provocar náuseas, vómitos, dolores de cabeza, ceguera permanente y convulsiones, entre otros efectos nocivos. Esto se debe a que, cuando es ingerido, se metaboliza lentamente en el hígado oxidándose por acción del alcohol deshidrogenasa. Generalmente, los síntomas empiezan a presentarse de 12 a 24 horas después de su ingestión. La absorción del metanol a través del uso constante de alcohol en gel adulterado puede generar otras complicaciones como: enrojecimiento, irritación y, en ocasiones, dermatitis.
Basado en todo lo anterior, nos damos cuenta de cuán dañino es para la salud si esta sustancia es ingerida o utilizada por los seres humanos, sin embargo, muchas personas han aprovechado la crisis del COVID-19 para vender alcohol de consumo y alcohol en gel a base de metanol, poniendo en riesgo muchas vidas.
El objetivo de este artículo es que la población se informe un poco más acerca de los riesgos de la ingesta de metanol y presten especial atención a los productos que consumen, procurando no comprarlos si son de dudosa procedencia, es más seguro comprar licor en lugares de confianza y no en puestos callejeros o lugares no autorizados.
Tome en cuenta las siguientes recomendaciones:
• Al desocupar la botella, se debe destruir el frasco, la tapa y la etiqueta, para evitar que sean reutilizados.
• El licor debe tener marca original, banda de seguridad, sistema de cierre intacto.
• Verifique las tapas; no deben tener ningún tipo de fuga, ni presentar deterioro.
• Las bandas de seguridad no deben estar completas: al abrirse deben dividirse en dos partes iguales.
• Las bebidas alcohólicas de precio demasiado bajo pueden ser falsificadas o adulteradas.
• Se deben revisar que las pestañas de los empaques tetra pack no tengan residuos de pegamento
• Las etiquetas deben estar en buen estado, al frotarse no deben soltar tinta.
• Se debe revisar el contenido a contraluz: no debe tener objetos extraños, ni partículas en suspensión.